En este post, quiero hablarte de las estafas en Bali al turista, pero que eso no te impida visitar la Isla de los Dioses. Bali es una pasada. A nivel natural, cultural y espiritual, no podría decirte nada negativo sobre ella. Pero una de las cosas que no me gustó de Bali es la sobreexplotación del turista. La verdad es que sientes que te ven como un euro con patas que va pululando por la isla y las interacciones que se generan con los locales pueden llegar a ser muy desagradables y pesadas.

Además, a causa de las pérdidas que generó la pandemia, se ha optado por acelerar su recuperación económica y se ha encarecido muchísimo para el turista y, a parte de los precios abusivos, también se han acentuado las estafas en Bali.

Por eso, como cuando vas a cualquier lugar, hay que ir con ciertas precauciones y buscar información de los posibles timos o estafas en los que puedes caer. Ya sabes lo que dicen, mejor prevenir que curar.

En esta lista aparecen 9 timos. Algunos los viví en primera persona, otros me los han contado viajeros con los que me he cruzado y de otros me avisó el personal de los homestay donde me hospedaba.

¡Espero que te sirva!

El cambio de moneda, una de las estafas más comunes en Bali

Esta es la pesadilla de muchos viajeros, que nos roben y que nos roben en la cara todavía molesta más. Los chanchullos en las casas de cambio son algo muy frecuente y un problema por el que pasan muchos turistas.

En Bali, veréis puestos pequeños en los que pone “Money Changer” por todas partes con cambios súper atractivos. No entréis a cambiar dinero. Lo mejor es que busquéis casas oficiales de cambio y que tengan el cartel “Authorized Money Exchange”.

¿Por qué os cuento esto? Porque en estos puestos pequeños se dan dos tipos de estafas, aprovechando la gran cantidad de billetes en rupias indonesias (IDR) que se obtiene cambiando 50 o 100 euros.

Te voy a poner un ejemplo y lo vamos a aplicar a los dos chanchullos que hacen en algunos de estos lugares. Imagínate que quieres cambiar 100 euros, que son casi 1.700.000 IDR.

  • Aprovechan para darte el cambio en billetes pequeños de 10.000 (170 billetes) o 20.000 IDR (85 billetes) y te dan una cantidad menor. Como la cantidad de billetes es tan grande, es complicado y pesado contarlos y, además, da pereza. Lo que puede pasar es que te fíes del cambio y te marches o que cuentes los billetes y, al haber tantos, te equivoques o te hagas un lío. Al final, te marchas con una cantidad mucho menor. ¡Te han engañado amigo!
  • Otra técnica que utilizan para estafar al turista es un simple juego de manos. Les das la cantidad que quieres cambiar, los 100 euros, y ellos sacan la cantidad exacta en rupias indonesias, 1.700.000 IDR. La persona que te está atendiendo contará el dinero varias veces enfrente de ti y, cuando no te des cuenta, se quedará con una parte de los billetes. Pese a que te haya quitado dinero, como tú no lo habrás visto y la cantidad de billetes seguirá siendo grande, te marcharás contento con tu cambio. ¡Pues te han engañado amigo!

Por eso, cambia siempre tu dinero en sitios autorizados, en cantidades pequeñas y tómate tu tiempo siempre para contar el cambio te dan.

Los guardias de seguridad del Tirta Empul y la plantación de café

Pura Tirta Empul es uno de los templos más famosos de Bali. Se traduce como el “manantial sagrado” y es que se cree que sus aguas tienen poderes mágicos. Por ello, muchos turistas y locales acuden allí a hacer un ritual de purificación en sus fuentes.

La visita es preciosa y en una hora puedes recorrer todo el complejo. Sin embargo, cuando sales puedes ser víctima de una estafa o, más bien, un engaño feo. Yo visité Pura Tirta Empul por la tarde y, al salir, uno de los guardias, con una cara de bonachón que no veas, se me acercó y me dijo que no podía perderme el atardecer en un mirador cerca de una plantación de café que estaba a cinco minutos. Le pregunté si era algo gratuito y me dijo que sí.

Llevaba muy pocos días en la isla y como mi experiencia con los locales en el resto de Indonesia había sido tan positiva acepté la recomendación y fui. Te tengo que decir que en pocos días aprendí que en Bali pagas hasta por respirar.

Cuando llegué, había dos guías esperándome para hacerme un tour por la plantación, sacarme mil muestras de café y hacer un recorrido hasta la tienda para venderme café a un precio totalmente desorbitado, sobre todo el café Luwak.

Esto no solo ocurre cuando sales del templo. En las reseñas de Google Maps, leí que a una chica se lo habían hecho justo al llegar. Le habían dicho que el acceso al templo estaba cerrado a turistas porque se estaba haciendo una celebración religiosa, que acabaría en un par de horas. Y le recomendaron que para hacer tiempo fuese al mirador a ver las vistas a las plantaciones de café desde allí. ¡Le pasó lo mismo que a mí!

Por tanto, si se te acerca un hombre vestido de seguridad y te dice que vayas a un mirador maravilloso, te recomiendo que le digas que sí y sigas tu camino. Si no, te verás rodeado de muestras de café nada más llegar y dos guías presionándote para que compres café Luwak (un café que se hace con caca de mono).

El sarong de los templos

Otra de las estafas en Bali está en sus mercados. Los vendedores de Bali son muy insistentes y, a veces, te sueltan alguna mentira para que les compres. Esta que voy a contarte la escuché varias veces y tiene que ver con el sarong que hay que llevar en los templos.

La primera vez que llegué a Ubud visité uno de sus mercados. Allí me paró una señora y me dijo que si no tenía mi propio sarong no podría visitar ningún templo porque no me dejarían entrar, ya que la religión hinduista lo prohibía. Me intentó encasquetar un sarong por 250.000 IDR. Cuando vio que no me lo tragaba y no lo iba a comprar, empezó a bajar y la desesperación la llevó a ofrecérmelo por 20.000 IDR. ¡Diez veces menos que el precio inicial!

Esto no es cierto. En todos los templos te dan un sarong en la entrada cuando compras el ticket de acceso y sin ningún coste añadido. Por tanto, si alguna mujer adorable te dice que debes tener tu propio sarong o te quedarás fuera de Lempuyang o de Tirta Empul, sigue caminando y no hagas ni caso.

Por cierto, este pareo que llevo puesto es un sarong 👇👇

Yo vestida con un sarong en Besakih Mother Temple

El acceso a Gitgit Twin y Sekumpul Waterfall, una estafa en el norte de Bali

¿Tienes ganas de visitar las cascadas más bonitas de Bali? En el norte de Bali está Munduk, una zona interior, verde y totalmente natural. ¡Pero con vista! Sus puntos turísticos también concentran algunas de las estafas más comunes en Bali.

Te cuento lo que me ocurrió en Gitgit Twin Waterfall para que no te ocurra lo mismo. Me quisieron hacer pagar cinco veces de lo que vale la entrada a estas cascadas. Cuando llegué al acceso principal de Gitgit Twin, que está señalizado con un cartel enorme, un señor se me acercó y me dijo que estaba cerrado y que había que seguir un kilómetro abajo para entrar.

Después de poner cara de “esto me huele a mentira”, volvió a insistir y me dijo que solo se podía entrar a Gitgit Twin por el acceso que daba un restaurante, que la entrada eran 100.000 rupias y que tendría acceso al trampolín y al columpio que había en la cascada. No es cierto. La entrada es la que está señalizada en un cartel enorme y vale 20.000 rupias. Tienes que aparcar, seguir caminando por el sendero que indica el cartel y en 10 minutos llegarás a la cascada.

Gitgit Waterfall. En esta imagen se ve el chorro de la cascada con el agua cayendo.

Otra de las cascadas más famosas de Bali es Sekumpul Waterfall. Dicen que es espectacular. Yo no fui a verla porque unos turistas me contaron que habían sido víctimas de la mafia del turismo de Bali en esta cascada y unos locales les habían bloqueado el paso y les habían obligado a pagar 200.000 IDR en la entrada, cuando el ticket solo vale 20.000 IDR en taquilla. Y, la verdad es que después de pasar por alguna situación un poco turbia pasé de la experiencia.

El acceso al Monte Batur, una de las estafas en el norte de Bali

En Bali, existe un negocio con la mafia local en el Monte Batur y decepciona bastante que ocurran cosas como las que te voy a contar ahora. El Monte Batur es uno de los volcanes activos de Bali y la excursión para ver el amanecer desde allí es muy famosa. Si te digo la verdad, yo no sé si la volvería a hacer. El trekking es muy duro y, además, nocturno. Llegas rebentado arriba y las vistas con las que te encuentras son preciosas, pero hace tanto frío en la cima que no las puedes disfrutar. Pero ese es otro tema…

Si quieres hacer la excursión, lo más aconsejable es que contrates un guía y vayas con un grupo organizado. Lo puedes hacer en cualquier puesto turístico de Ubud. Si vas por libre puedes tener mala suerte y dar con una de las mafias del turismo que hay en la isla. Existe un grupo local que tiene secuestrada la zona y no dejan que los turistas hagan la excursión al Monte Batur por libre.

Cuando vas con guía, te dejan pasar porque yo imagino (no te lo puedo asegurar porque no lo sé con seguridad) que entre ellos tienen sus acuerdos y tejemanejes, etc. En cambio, si vas sin guía, puede pasarte que justo empezar la excursión, aparezca un grupo de hombres y te diga que debes pagar 400.000 IDR por subir al volcán. Si no pagas, no te dejarán pasar.

Monte Batur con los primeros rayos de luz del día.

Realmente, para acceder al lugar no se necesita entrada. Es decir, es de libre acceso. Pero los locales se inventan este tipo de cosas en muchos lugares en Bali para que pagues. Mirando las reseñas de Google Maps, vi que muchas personas se quejaban de esto y de lo agresivos que se ponían estos grupos, generándose situaciones muy tensas y que acababan dejándote sin excursión. De hecho, la gente ya ha empezado a publicar las experiencias sobre las estafas en Bali y revisar estas reseñas es muy útil.

En las terrazas de arroz me pasó algo parecido. Estaba paseando por Tegallalang y quería cruzar de un lado de las terrazas al otro por un puente que había y conectaba ambas partes. Llegando, me doy cuenta de que hay un local con una mesa y una silla de plástico sentado en el acceso al puente. Una vez allí, me dice que si quiero cruzar le tengo que pagar 50.000 IDR. Me di la vuelta y accedí por fuera. La cantidad es ridícula, pero había momentos en los que me sentaba mal que me tomasen por tonta.

Los guías de las entradas de los templos

Es casi imposible ir a Bali y no visitar uno de sus templos. Lempuyang, Tirta Empul, Gunung Kawi, Ulun Beratan, Tanah Lot… todos son una maravilla y dudo mucho que quieras resistirte a la tentación que suponen para cualquier turista.

Pura Lempuyang, un templo del norte de Bali.

Aunque, lamentablemente, los pura también son un nido de timadores… en ellos se concentran una gran parte de las estafas en Bali y es que hay locales que aprovechan lo turísticos que son los templos para engañar al viajero y hacerle pagar por visitas guiadas que no ha pedido. Esta estafa también tiene dos versiones.

  • Cuando llegues al templo, puedes encontrarte con algún hombre en la puerta que te diga que no puedes acceder al templo sin un guía porque es un lugar sagrado y hay lugares donde el turista no puede acceder. Y curiosamente, tendrás tanta suerte que él será guía. Según te cuenta, para entrar tendrás que pagar su tarifa de guía, además del precio de ticket. Esto no es cierto. Puedes entrar a cualquier templo sin ir acompañado de un guía.
  • Otra cosa que te puede pasar es que llegues al templo y un hombre quiera acompañarte durante la visita y te vaya dando explicaciones de las distintas partes del templo, los dioses hinduistas, etc. ¡No te confíes porque esto no es por su buena voluntad! ¡En Bali NADA es gratis! En cuanto acabe el recorrido, te exigirá una donación.

Lo mejor que puedes hacer ante estos casos es preguntar siempre en ventanilla y asegurarte de que la información que te están dando es cierta.

Los precios desorbitados de los taxis, las estafas en Bali con el transporte

En Bali no hay transporte público. Para moverte, tienes que contratar un conductor, coger un taxi, alquilar una moto o tomar Grab o Blue Bird, que sería el equivalente a Uber en Indonesia.

En cuanto salgas del aeropuerto de Bali, se te van a echar encima un montón de taxistas ofreciéndote sus servicios a precios altísimos. Son precios que ponen ellos mismos porque estos taxis no cuentan con taximetros. Por ejemplo, 600.000 IDR de Denpasar a Ubud o 800.000 IDR a Padangbai. Están totalmente inflados y los trayectos no son tan largos como para tener esos precios.

Es por ello que te recomiendo que uses siempre las aplicaciones Grab o Blue Bird y contrates el traslado a través de ellas. Funcionan como Uber. Pides un vehículo desde el teléfono móvil y la aplicación te calcula el coste antes de confirmar el servicio. Aunque tienes que pagar en efectivo, sus precios son mucho más económicos que los de los taxistas locales.

Traslados y tours por el doble de precio al acordado

Este tema tiene tela y, además, te quedas con una cara de tonto que no veas cuando te ocurre esto. Otra de las estafas en Bali es que te cobren más de lo pactado previamente. Contratas un trayecto o una excursión por un precio y, cuando ya te han dado el servicio, te dicen otro mucho mayor y tienes que acabar pagando.

Pongamos por caso que estás con tu amigo en Bali y decidís contratar los servicios de un conductor para que os lleve a cualquier lado, negociáis con él y cerráis un precio que parece razonable.

El tour es maravilloso y todo es perfecto hasta que llega el momento de pagarle. Cuando todo acabe, os pide el doble de lo que habíais acordado. Os quedáis totalmente atónitos y le decís que el precio pactado era la mitad. Él te responde “sí ese es el precio por persona” y tenéis que acabar pagando el doble si no queréis buscaros un problema.

Por eso, es muy importante que contrates los servicios de los guías y los conductores dejándolo todo bien claro y especificando si es por persona, por hora, por día… no te dejes ABSOLUTAMENTE NADA en el aire porque se pueden aprovechar de ese despiste.

El alquiler de motos, otra de las estafas en Bali

Alquilar una moto en Bali es muy tentador, ya que no hay transporte público y contratar un conductor sale bastante caro. No deberías de pagar más de 70.000-80.000 IDR por día por la moto con el depósito de gasolina lleno.

Estoy segura de que no hace falta que te diga esto, pero te lo recuerdo, por si acaso. Cuando alquiles una moto, hazle las fotos que te hagan falta para que luego no te encasqueten una rallada o golpe que ya tenía. Y hazle foto también al contador de gasolina, que luego no puedan decirte que te la han dado llena (esto pasa muy pocas veces).

Fotografía de una moto blanca alquilada en Bali.

En el mismo puesto o tienda donde la alquiles, haz una buena revisión y encuentra todos los desperfectos de los que podrían hacerte responsable.

Además, en Bali verás que hay personas que intentan alquilar sus motos personales a los turistas. Si alguien te ofrece esto, ignóralo y sigue caminando o niégate rotundamente. Ten mucho cuidado con este tema porque hay una trama detrás que puede darte un buen susto.

En uno de los homestay en los que estuve, la propietaria me contó que un huésped había tenido una experiencia muy mala alquilando una moto a un hombre. Después de alquilar la moto, el chico se fue a la playa y, cuando volvió, la moto no estaba. Resulta que el propietario lo había seguido y se había llevado la moto con las llaves de repuesto. Cuando el huésped pudo volver y le contó al propietario que la moto había desaparecido, este le dijo que lo había dejado sin moto, que tenía que compensarlo con 8.000.000 IDR de una manera muy violenta. ¡Así que cuidado!

¡Y hasta aquí puedes leer! Espero que con este artículo puedas evitar pasar un mal trago y no te la cuelen. Por cierto, si conoces otros timos o estafas en Bali, te animo a que lo dejes en un comentario y ayudes a otros viajeros con tus aportaciones.

Stay safe y ¡muchas gracias por leerme!

Categorías: AsiaIndonesia

Iria

¡Hola! Mi nombre es Iria y soy de Barcelona. Soy periodista y hace unos seis años descubrí el placer de viajar. Desde entonces no he parado quieta. Lo hago siempre que puedo. Hace seis años que el marketing digital es mi sector profesional. Pero, sin duda alguna, la parte que más me gusta de mi trabajo es la creación de contenidos porque me encanta escribir, informarme, comunicar, estructurar artículos, ilustrarlos con fotografías y un largo etcétera. ¡Espero que mis artículos te sean de ayuda!

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